jueves, 5 de noviembre de 2009

Causas, consecuencias y soluciones

Estamos viviendo en un mundo que se fue transformando a lo largo de los siglos en lo que es hoy en día, un mundo con sueños sin realizarse, valores que no son tomados en cuenta o no les dan la importancia que merecen, personas que ponen el dinero antes que el amor y otras que simplemente las mueve el rencor, producto de la situación en la que viven. Eso es tan solo el reflejo de una generación pasada que jamás imagino un futuro así, una generación que estuvo llena de lucha y corrupción pero con un ideal noble y puro conocido con el nombre de libertad, muchas veces el origen de las peleas y otras tantas de la unión.
A lo largo de los años, el estandarte de esa época se fue descosiendo así como también lo hacía el alma de las personas al ver que su trabajo no traía frutos, años de lucha de sus abuelos y padres se perdían como el sol en la noche. Poco a poco las personas fueron perdiendo la fe en lo que alguna vez creyeron dejándose influenciar cada vez mas por un pensamiento y una visión de la vida pesimista trayendo consigo nuestra realidad actual.
Veamos un ejemplo, es algo muy curioso pero creo que tiene sentido, a mi me encanta mucho escuchar, recopilar experiencias de gente mayor y también de mis amigos, quienes recién caminan por el largo sendero de la vida junto a mi, lo curioso es que con cualquiera de los dos grupos siempre hay una persona que cuenta algún hecho de su vida en el que las cosas no le salieron muy bien que digamos y dicen cosas como “el universo tiene un complot en contra mía” o “yo no creo en Dios, todo lo que soy es por merito propio, el jamás me ayudo” y mi favorito “las cosas son así, yo ya lo viví, te vas a chocar muchas veces sin conseguir nada” queriendo justificar que ser alguien en la vida no es para todos y que en este mundo de “azar” son pocos los que llegan con bien a disfrutar su vida al máximo. El que nunca oyó esto que mencione recién en su vida por favor que de gracias todos los días al cielo por el entorno en el le toco crecer y desenvolverse.
Resumiendo, podría decir hasta ahora que “un hombre es lo que hicieron de el”, aunque tengo un pensamiento un poco contradictorio. Yo tenia entendido que estamos capacitados para elegir lo que queremos ser, solos y sin ayuda de nadie, y que ser un ser racional no significa ser hipócrita.
Siguiendo con los ejemplos, otra cosa interesante es que en una discusión formal muy pocos aportan soluciones mientras que la mayoría solo se quejan sin decir nada útil, y si no me creen presten atención la próxima vez que participen en alguna. Siempre que exista alguien que tenga tendencia a echar abajo su trabajo no le hagan caso ya que a esa persona en ese momento no lo mueven pensamientos razonables, solo dudas y fracasos. Miren siempre el lado bueno de las cosas, aprovechen todo lo que tienen, si quieren les nombro un par de cosas para saber porque tienen que dar las gracias, lo primero, la vida, después, poder de la razón, podemos seguir con, la posibilidad de elegir lo que nos gusta, ser dueños de nosotros mismos, ser libres, etc ¡Vaya que desdichados que somos todos! ¿no les parece?
Ahora lo que yo quiero ofrecerles es otra visión del mundo, otro punto de vista desde mi humilde lugar, porque creo que toda opinión cuenta y puede ser útil si todos dejamos de lado nuestros nombres y títulos para tratarnos de igual a igual siendo lo que somos, humanos. Si podemos comprender la inmensidad y las posibilidades que lograremos el día que todos entendamos este concepto los problemas se solucionarían mucho mas fácil.
Como final quiero decir que recuperemos esos valores que alguna vez una generación supo apreciar y deposito toda su fe en ellos, plantemos esa semilla hoy recibamos sus frutos con alegría, y si el tiempo pasa y el árbol no aparece, no se preocupen, no cometan el mismo error que cometieron la humanidad antes, sigan regando esa semilla y esperándola con ansias siempre como si fuera el primer día, que en cualquier amanecer germinara esa semilla.